martes, 21 de abril de 2009

Reina Roja: Encuentros premeditados

Ella es violinista y él un vendedor de sueños. Ella llena el alma con notas graciosas y melancolía, él vende lo mejor del mundo a un precio exorbitante.
Ella lo conoció una mañana nublada, esas en las que no da ganas de levantarse. Se levantó, quitose el pijama y fue a desperezarse al baño. Se desnudó frente al espejo y al mirarse pensó que aun era bella. Se acarició porque nadie lo hace y luego con pena se metió a la ducha. Dejo que el agua fría golpease su aterciopelada piel mientras sus brazos tiritaban al compas del ruido callejero. Se secó con la frazada porque no tenía toallas y se fue al trabajo sin desayunar; rutinario: tomar combi en el paradero, esperar sentada hasta que se suba alguna persona mayor y cederle el asiento porque nadie más lo haría, mucho menos los jóvenes que deberían dar el ejemplo. Llega al trabajo, todos la saludaban mirándole los pechos, todos se la comían con los ojos pero nadie se interesaba en conocerla.
Pero ese día fue diferente. Fue algo más allá del almuerzo extranjero, algo más que el despido masivo por la maldita crisis financiera y algo mucho más profundo que la disminución de ventas en el último semestre en el mercado juvenil. Fue de esas cosas que están escritas pero que nunca creerías.
Ella no lo esperó hasta que se acercó aquel chico con un bombón diciendole que era la mujer más bella que habia visto en dieciseis mil años. Atrevido y tonto el comentario, pero la mirada de aquel joven (le echo veinte, quizas veintiuno) terminó por desarmarla, se sintió cual Alicia frente a la Reina Roja y no pudo moverse del sitio por más que corría pero aún así intentaba correr hasta que él sentenció:
-Está dicho hace más de un siglo que te encontrase.

11 comentarios:

Elena Cardenal dijo...

Te recomiendo el libro de lorenzo silva, la reina sin espejo, porque tiene algo que ver con tu relato y seguro te gustará.
Quien sabe si estamos predestinados a conocer a ciertas personas o no, pero que habrá reinas rojas en nuestro camino eso es seguro.
Besos!!

Quijo - Meli Polo Fdez dijo...

Todo esta escrito?, ¿somos nosotros los que escribimos nuestro propia vida?¿por qué nos encontramos con determinada gente en el camino? Un abrazo!!!!

Anónimo dijo...

"A veces podemos encontrar el amor en cualquier lugar, aunque sea un millón de años más tarde".
Creo ligeramente en el destino, más que nada por ciertas circunstancias...

Un saludo.

anna dijo...

Quiza la chica del cuento ya empezo con el dia un poco tonto, que hizo el chico que fuera distinto a los demas ??? No se no lo acabo de pillar....Pero la historia/ el cuento en si me gusta si no le busco el que.

Un abrazo

Alhy dijo...

"La tierra giró para acercarnos,
giró sobre sí misma y en nosotros,
hasta juntarnos por fin en este sueño,
como fue escrito en el Simposio.
Pasaron noches, nieves y solsticios;
pasó el tiempo en minutos y milenios.
Una carreta que iba para Nínive
llegó a Nebraska.
Un gallo cantó lejos del mundo,
en la previda a menos mil de nuestros padres.
La tierra giró musicalmente
llevándonos a bordo;
no cesó de girar un solo instante,
como si tanto amor, tanto milagro
sólo fuera un adagio hace mucho ya escrito
entre las partituras del Simposio".

Eugenio Montejo
(Caracas, Venezuela, 1938)

Leerle me ha recordado esta maravilla que seguramente conocerá :)

Tiene un regalito en mi blog, pero, si no quiere, no hace falta que siga la cadena ;)

Kisses conmovidos ***

silvia dijo...

Gracias por tus comentarios!!! Son preciosos siempre :-)

El destino... el destino a veces te hace ser un extraño prisionero del tiempo...

Chocolate dijo...

Muy femenino el texto.

Parece que nos entiendes.

Me encantó la última parte, siempre he pensado que nosotros construimos nuestra vida, sin embargo hay cosas que definitivamente estaban escritas que sucedieran.

:)

au revoir

Ceniza AC dijo...

en algun lugar
en algun tiempo
en alguna circunstancia...
si dos personas estan destinadas,
el destino solo hace lo suyo.


A veces, es lo que nos gustaría creer.
A veces sólo nos confunde(mas)
A veces solo nos queda esperar.

Un Saludo Cibernético. =D ¡¡¡

gianna dijo...

muy bello lo que escribistes, me conmovio mucho, gracias por tu hermoso comentario en mi blog, un beso

lys dijo...

Es preciosa la historia en su tristeza, es bueno mantener la mente abierta.

Un beso

Anónimo dijo...

Y la encontró.

Mer