jueves, 4 de marzo de 2010

De mí para tí

Prefacio: extracto de un cuaderno reciente, de un recuerdo especial, de nuestra primera tarde oficial.
=)


Tengo la necesidad imperiosa de anotar todo. Cada gesto. Cada palabra. Cada sentimiento. Por sí un día dejas de mirarme. Y así en caso de extravío no perder nada.
Muchas veces me he planteado dejar de escribir esta historia, de descansar y sentarme un rato a leer estas páginas que jamás escriba. Quizás es demasiado esfuerzo: mi actividad mental es continua, apasionada, versátil y totalmente insignificante. Abunda en inservibles analogías y en ociosos escrúpulos. Me mortifico pensando una y otra vez si debería dejar de escribir, pero el simple cuestionamiento de esto genera más letras que las que opaca.
Soy un intento de artista, y artista es toda persona que retiene sentimientos en un cuadro, en una canción, en una estatua. Intento capturar esta tarde para nunca olvidarla, para poder tenerte siempre y nunca dejarte ir.
Llegué un tanto tarde y aún así andaba paciente: algo me decía que todo iría bien. Y es que si no era el presentimiento, eras tú que apareciste de la nada, con tu sonrisa inmortal (esa que tanto me gusta) y tu voz encantadora.
Cháchara banal, la de siempre, la que me gusta. Nos embriaga y nos hace olvidar por un momento lo que pasó en el messenger pero no, sigue presente. Me quitas el alma con esa ligera risa gutural mientras damos vuelta a la manzana una y otra vez, sin que me atreva a decirte, sin que me atreva a acercarme, tu fragilidad es apariencia? pues me da miedo quebrarte.
Y zaz, en el momento menos pensado me abrazas. Fue como esa vez, ya sabes, con tu cámara. Fue espontáneo, natural (dentro de mi cognición, claro... habrá sido ese tu plan?), fue perfecto. No me había dado cuenta que tu cintura es perfecta o que tu pelo desprende una fragancia propia intoxicante, de esas que aturden.
Sabes cuántas veces perdí las esperanzas de que este momento llegara? Miles, tal vez millones. Soy feliz sabiendo que existes, que tu sonrisa está allí, que tus ojos perturban la naturaleza. No sabes cuanto tiempo me ha tomado aceptarlo, no sabes cuanto he sufrido en silencio, solamente esperando cada nueva semana para llamarte y preguntarte Cúando.
Me sueltas.
Seguimos caminando, tú sonriendo, yo a la deriva. Eres mujer astuta y letal, tienes la situación bajo control y solamente me queda esperar el próximo golpe, total, puedes este pobre mortal desafiar tu decisión divina? De la nada, me atacas!! Y termina ocurriendo: nuestras gafas chocan... que horror!!
Ríes, intento salvarla pero aflota algo peor: mi torpe maniobra, mi falta de práctica, mi temor. Lo notas, haces apunte mental implícito y lo delegas al desván.
¿Estás sonriendo de verdad?

09-11-2009

6 comentarios:

hatoros dijo...

LEESELO EN UNA DISTANCIA CORTA
ES COJONUDO

Norae Lebowski dijo...

Claro que sonreía de verdad, ¿cómo no iba a hacerlo? Es precioso. Yo también intento retener toda la información sobre él, sobre nosotros para no perderla nunca y no echarla en falta.
¡un beso Favio!

María dijo...

QUE-COSA-MÁS-DULCE
en serio, si este tipo de cosas ocurren de verdad y duran para toda la vida(o lo suficiente :P)vuelvo a creer en el amor...
un beso:)

bche dijo...

que inocente y tierno te ha kedado!! :) y si es cierto k has retenido eso, entonces es posible k puedan existir citad y tardes románticas como de peli :) xk la tuya verdaderamente lo ha sonado :)
yo pienso k sí k sonreía de verdad :)

un beso!! :D

Ella dijo...

no eres un intento de artista, eres un artista completo y la mitad de otro, deja eso de 'intento de artista' para los que no te llegamos ni a los talones. te ha quedado hermoso! nunca dejes de escribir, si lo haces ya no habra quien me haga sonreir con sus palabras tan bonitas :)


saludos~

soystef dijo...

wawwwwwwwwww como no acabar sonriendo . . .