Internet Inalámbrico (sin venta ni lucro)

Me he ilusionado varias veces pero solamente me he enamorado dos veces. Cuando uno se enamora tiende a obtener unas alas grandes que lo hacen volar hasta el cielo y lo hacen olvidarse de sus límites físicos como suelen ser la gravedad y demás leyes. Cuando somos conscientes de todo esto, caemos y perdemos la esperanza.
No tengo dinero suficiente como para pagar una línea de Speedy de las que ofrece Telefónica, así que conseguí mi tarjeta Encore (no pude más por falta de dinero) y una antena que prácticamente murió la mes de uso. Tuvo que pasar un tiempo hasta que pude obtener otra antena que me permitió volver a tener señal de Internet inalámbrico.
Y hoy me doy cuenta de que el primer párrafo y el segundo de esta entrada son iguales.
Cuando recién obtuve Internet me sentí superior, uno más en el clan de todas las personas interconectadas a nivel mundial, uno más de los "aceptados" Navegué mucho y hubo poco que no pudiese hacer: me sentía valiente. Pero pronto algo falló y todo se fue al tacho, dejé de recibir señal y se me hizo difícil vivir sin algo que ya había probado y que me había gustado en exceso.

Así fue mi primer amor (el verdadero, no la ilusión).

La segunda antena fue desde el comienzo más estable y lo sigue siendo, aunque a ratos me falle, aunque a ratos se ponga caprichosa y no quiera hacer nada por mí. No sería capaz de reemplazarla, hace bien su trabajo y yo la mantengo en lo posible. Hay días en que no soporto la red y no enciendo la computadora hasta varios días después en que me siento relajado. Lógicamente, justo en esos momentos la red no está disponible, como quien quiere enseñarme una lección, como quien demuestra su superioridad. Posteo entradas solitarias que no son leídas, escribo pedazos de mi alma que son ignorados y ¿para qué? Para poco a poco ir conociendo mejor a esta red que al mundo domina. Para ir ganando un poco de experiencia en este campo. Para ir conociendome mejor. Para conocerte mejor.
El internet es tan grande, casi mayor que el mundo entero. Nadie puede conocerlo por completo y andie lo hará. Tal vez unos pocos entiendan su esencia y puedan vivir en paz con dicha respuesta. Tal vez otros pocos enloquezcan en su búsqueda y desistan para quedarse solamente en un pequeño buscador de esos que sale en las páginas principales de los exploradores. Otros como nosotros viviremos en paz con el simple hecho de saber que nunca sabremos la verdad.
Es tan complicado definir Internet que no lo ahré ni me esforzaré. Solamente pido por algún día encontrar el host que dé sentido a mi vida...

Claro que al decir Internet, decía amor y viceversa